UNA PROPUESTA MÁS ÍNTIMA Y MÁS ACUSTICA DEL ROCK AND ROLL
“Luna” posiblemente la canción más diferente junto con “De plata pulida” de todas las canciones del disco. Entre riffs de Rock and Roll, rebeldía urgente e himnos generacionales, encontramos este aparente oasis para la calma intimista
in crescendo gradualmente.
“Luna” narra en primera persona y de forma intimista una ruptura donde “la nostalgia se hace palpable mediante líneas musicales lideradas por la guitarra y el bajo” conforme describe la reseña de Mariscal Rock.
Por encima de la energía, el optimismo o la fortaleza que trasmiten la temática de las canciones del disco, aquí en “Luna”, de forma más íntima y acústica, toca aceptar la derrota sentimental. A pesar de ello, se recrea en el dolor haciéndolo estribillo “cogió su vida y se marchó”. Al final de la canción, después de lamerse las heridas, toca reinventarse “mintiendo al tiempo” y con un maravilloso solo de guitarra que acompaña a la superación de ese momento doloroso. La canción se rehace y crece dejando la puerta abierta al optimismo.
En resumen, si escuchamos el disco de forma correlativa como se hacía antes, la tercera canción de las 10 que tiene el disco homónimo de Carameloraro es una canción que, sin ser una balada, da un momento de reposo intimista sin perder la esencia del Rock and Roll.
